Somos Aritz Alcubilla, Ivan Benko e Iñaki Serrano, estudiantes de la universidad, y junto a nuestro amigo Aitor Martinez, tuvimos la suerte de participar en el estreno del concurso “Zurekin Bat” de ETB1, presentado por Ainhoa Etxebarria.
Todo comenzó cuando a Iñaki, gracias a una experiencia pasada en la TV, le llamó uno de los productores y acudió a un “programa piloto” en la sede de K2000 en Galdakao. Quién iba a pensar que tres meses después volverían a llamar a su compañero de piso, Aritz, para participar en el estreno.
En el programa, producido por la empresa K2000 para EITB y adaptado de un formato Israelí, compiten dos equipos durante tres fases donde tienen que enfrentarse a diferentes preguntas. Los ganadores realizan dos fases finales donde los aciertos se convierten en dinero para obtener presupuesto para un objetivo que fija cada grupo.
En cada grupo, hay un líder que responde las preguntas. La clave del concurso consiste en la confianza que tenga el grupo en el líder que hará multiplicar los puntos cada vez que estos pulsen el botón de “Zurekin bat” y acierten.
Una vez que nos llamaron no dudamos en participar debido a la curiosidad que nos producía conocer las entrañas de la TV. Nos presentamos como el equipo A-8: unos compañeros de piso que buscan una piscina para la terraza.
La experiencia fue tan buena como nos esperábamos. Sin embargo, la suerte no estuvo tan presente en nuestra andadura en el concurso. Lo que más nos impresionó fueron los interesantes apuntes que nos iban contando los diferentes miembros del programa. Se grabaron 3 episodios en 2 días e Imanol (guionista y ex-alumno) nos hizo un tour y nos explicó todos los detalles que nos intrigaban relacionados con el plató, los micrófonos, el maquillaje… Hasta pudimos acceder a la zona de control.
Lo pasamos bien y nos reímos bastante entre las pausas, descansos y picoteos, además de ver los “secretos” de las sedes de Galdakao y Miramón como: los antiguos controles, máquinas de edición analógicas, la zona de atrezzo o el decorado de la conocida serie de la casa “Goenkale”.
Definitivamente, al margen de que no obtuvimos el bote, fue una gran experiencia que recomendaríamos a cualquier alumno de Comunicación. Participar en un concurso de este tipo es la excusa perfecta para conocer la televisión por dentro.
