Suele decirse que el mejor camino para conquistar el corazón de una mujer o un hombre es siempre su estómago. Si esto es cierto, pocos serían los que esquivaron las flechas del amor el pasado jueves, en la jornada de Deusto Emprende de la universidad. Como suele ser habitual durante el día, no faltaron actividades como los ya clásicos Wokas, una charla sobre Google, un taller de graffiti o actuaciones musicales y teatrales; pero, sin duda, el gran protagonista de la jornada del jueves fue el culto a la gastronomía y al paladar.
Y es que resulta que nuestro paladar no solo sirve para dejarnos enamorar, sino que también es un buen medio para captar nuestra atención, removernos las tripas y hacernos donar unos euritos y sentirnos un poco mejor. Así da gusto (nunca mejor dicho) colaborar con una buena causa. Bajo la influencia de tan magna estrategia de marketing, fueron muchos los que se acercaron a la cafetería del campus para tomar un poco de chocolate caliente o a expandir sus horizontes culinarios degustando platos típicos de la comida alemana y mexicana, o asistiendo a un breve curso de introducción a la cocina japonesa impartido por la fundación Goyeneche.
Como todos sabréis, en toda buena comida que se preste no puede faltar tampoco un buen vino. De esta forma los alumnos de quinto curso de LADE, en colaboración con Bodegas Eguren, organizaron una cata de vinos para desvelarnos algunos de los misterios de la industria vitivinícola. Por último, la jornada finalizó con un torneo de póker benéfico organizado también por otros alumnos de quinto de LADE. Desgraciadamente, tras la tempestad vuelve la calma y solo queda contar los días para la próxima edición de Deusto Emprende, que seguro dejará de nuevo a muchos boquiabiertos.
Diego Ormaechea
Te agradezco, este blog me fue util