Venir, lo que se dice venir, vienen del latín (exámen), aunque a más de uno le gustaría que no viniesen del latín ni de ninguna parte. Pero ay, la llegada de los exámenes es ya un hecho. Manos heladas, prisas, enésima comprobación de DNI en el bolsillo en el que lo habíamos dejado, que nunca se sabe, nuevo vistazo en diagonal a ese capítulo que, pese a tenerlo escrito y hasta pasado a limpio desde hace meses, apenas hemos ojeado y que -no nos engañemos- hoy no va a caer… los hay de distinto tipo, médicos, de conducir y hasta de conciencia. Pero no, lo que preocupan ahora mismo, los que atenazan articulaciones y aprietan tapas de boli hasta hacerlas desaparecer entre los dedos son los de siempre, los de toda la vida. Hombre, sí, también los hay que afrontan el trago sin mayor preocupación por tener, como dicen los futbolistas cada lunes, «los deberes hechos», pero siguen siendo minoría y además unos revienta-reportajes. Precisamente eso, un reportaje, es lo que ha elaborado el Grupo Multimedia de estudiantes de HUCO entre repaso y repaso. Los exámenes y esa manía tan suya de aparecer en cuanto empieza el año, nada más guardamos el arbolito. Un reportaje que empieza -no podía ser de otro modo- a puerta cerrada.
Asier Leoz